Si usted es de los que dice que le hicieron una oferta laboral, o que en las bolsas de empleo es donde se encuentran muchas de las ofertas laborales, esta lectura es, indudablemente, para usted.
Acostumbrados ya a decir que una empresa hace ofertas laborales, evidenciamos nuestro desconocimiento de la realidad del mercado del trabajo. Siendo el trabajo el bien, es bueno revisar detalladamente los conceptos de oferta y demanda.
Por el lado de la oferta, los servicios de trabajo que un trabajador “alquila” a los empresarios son inseparables de ese trabajador. Por el otro lado, la demanda de trabajo es una demanda indirecta o “derivada” de las demandas de los productos que se producen [1]. Por ejemplo, un ingeniero ofrece su trabajo a una empresa que fabrica tuberías, mientras la empresa demanda el servicio del ingeniero debido a la demanda de tuberías que el mercado de tuberías manifiesta. Es decir, la oferta de trabajo siempre está del lado del individuo y la demanda siempre está del lado de la organización.
Habiendo analizado lo anterior, ¿volverías a decir “oferta laboral” cuando de una demanda de trabajo por parte de una empresa se trata?
Esta falta de conocimiento de la economía del mercado laboral, nos ha llevado a muchos a tomar decisiones inadecuadas en una negociación laboral. Pero bien, ¿qué beneficios nos trae el estudio de la economía laboral? Según McConnell et al [1], los beneficios que pueden reportar la comprensión de los principios básicos de este campo son tanto personales como sociales. La economía laboral suministra información y presenta instrumentos analíticos que pueden resultar útiles para tomar decisiones personales y empresariales relevantes para los mercados de trabajo. A continuación, detallaremos mejor estos dos beneficios.
1. Perspectiva personal
La mayoría de las personas ha participado de alguna forma en el mercado laboral, por lo tanto los aspectos de la economía laboral tiene relevancia inmediata. Asimismo, para quienes ocupan puestos de dirección, la perspectiva analítica que da el conocimiento de la economía laboral debería ser útil para tomar decisiones empresariales racionales.
2. Perspectiva social
El conocimiento de la economía laboral debería ayudar a ser un ciudadano más informado y un votante más inteligente.
Tomemos esta como una excelente oportunidad para volvernos más analíticos en cuanto al mercado del trabajo se trata, el conocimiento que se geste de este ejercicio se convertirá en una muy provechosa herramienta y rendirá muchos de los beneficios que antes citamos.
[1] McConnell, C.; Brue, S. y Macpherson, D. (2007), Economía Laboral, 7ª edición adaptada, McGraw Hill.
Hay 0 comentarios